La Corona de Adviento es un símbolo tradicional que marca el comienzo de la temporada de Adviento en el calendario litúrgico cristiano. Consiste en una corona hecha de ramas verdes, generalmente de pino, y cuatro velas colocadas en su interior. Esta antiguamente fue usada para simbolizar la creencia de que la naturaleza nunca moría y siempre renacía, incluso en invierno.
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En la actualidad, la Corona de Adviento se ha convertido en una tradición profundamente arraigada en muchas familias y comunidades cristianas. Cada elemento de la corona y sus velas tiene un significado especial que evoca la preparación espiritual y la esperanza durante las cuatro semanas previas a la celebración de la Navidad.
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